Si en 1996 la obra de Wislawa Szymborska apenas era conocida por el lector de habla hispana, en estos momentos la situación es, sin lugar a dudas, muy otra. Aquí poemario que sigue tras la obtención del Premio Nobel de Literatura a Instante (Igitur, 2004) y Dos puntos (Igitur, 2007)-, ve la luz en español en el mismo año de publicación del original polaco y nos pone delante, una vez más, de esa aguda e irónica mirada que caracteriza a la poeta polaca. La memoria, el paso del tiempo, la belleza, el amor o el desamor, el dolor, los sueños, la humanidad en suma- y los misterios de lo cotidiano, todo queda filtrado por una escritura sutil, intimista y clarividente, en apariencia sencilla, que la ha situado entre los poetas europeos más relevantes de la segunda mitad del siglo XX y comienzos del XXI.