Emotiva, irónica e inteligente. Una novela teñida de humor y tragedia que habla de nuestra capacidad para soñar incluso en las circunstancias más difíciles. A Hazel y a Gus les gustaría tener vidas más comunes. Algunos dirían que no han nacido con estrella, que su mundo es injusto. Ellos son sólo adolescentes, pero si algo les ha enseñado el cáncer que padecen es que no hay tiempo para lamentaciones porque, nos guste o no, sólo existe el hoy y el ahora. Por ello, con la intención de hacer realidad el mayor deseo de Hazel -conocer a su escritor favorito-, cruzarán juntos el Atlántico para vivir una aventura contrarreloj, tan catártica como desgarradora. Su destino: Amsterdam, el lugar donde reside el enigmático y malhumorado escritor, la única persona que tal vez pueda ayudarles a ordenar las piezas del enorme rompecabezas del que forman parte.