SANTINI, BERTRAND / GAPAILLARD, LAURENT
¡Ah, cómo añoran los Monstruos los tiempos pasados! El niño de antaño era una criatura tierna e ingenua. Un disfraz de abuelita bastaba para hacerlo caer entre sus garras. El consumo regular de dichos angelitos llenos de inocencia garantizaba a los Monstruos una salud de hierro, tanto en verano como en invierno. Desgraciadamente, nuestra época obliga al Yark a ponerse a dieta. Casi no quedan niños comestibles en la actualidad. Hoy en día, los sinvergu¨enzas se multiplican sobre la tierra cual si fueran pústulas sobre el mentón de una bruja. En los patios de las escuelas bulle un pueblecillo de niños mentecatos y malvados, fiel retrato de sus progenitores. (p. 13) El Yark, un Monstruo terrible de largas garras curvas, tiene mucha hambre. Desgraciadamente, su estómago delicado sólo puede digerir niños buenos y amables, cada vez más escasos. Este libro hilarante y conmovedor, lleno de espléndidas ilustraciones, relata la búsqueda desesperada de esta pobre bestia por encontrar alimento, las desagradables sorpresas que lo aguardan en ese intento y el descubrimiento de la amistad y el amor, que lo trasformarán para siempre.