Desde Nueva York, Iván Morante recuerda o cree recordar cómo fue su infancia como alumno pionero en la embajada de Cuba en La Paz. Aún no ha caído el muro de Berlín y la guerrilla guevarista, el programa soviético y la injerencia de La Habana en América Latina componen una fuerza en colisión con las promesas y fantasías de otro imperialismo, el norteamericano.
Nuevos juguetes de la Guerra Fría es una novela policial sin crimen, en la que la búsqueda de la verdad se convierte en un juicio al padre. Es una novela que recrea la vida en los ochenta donde las guerrillas guevaristas y el sueño americano luchaban por tomar los sueños de América Latina. Es una novela de espías en las que los secretos son familiares, los bandos no están claros y los héroes ficcionales y los reales se confunden unos con otros.
De Robles y de la novela, el reconocido escritor Antonio Muñoz Molina ha dicho: "Es un escritor poderoso y completo, un novelista con una potencia narrativa admirable, con un sentido tan agudo y exacto del fraseo de la escritura como de la construcción, la trama, el misterio, la gradación de las informaciones. Y el golpe final es un fogonazo de puro thriller que alumbra a la vez lo más oscuro y lo que menos puede saberse de la identidad verdadera de las personas".