En 1935 Paris-Soir propone a Saint-Exupéry que viaje a la URSS para realizar un reportaje del país, todavía enigmático para el resto de Europa, que en aquellos momentos ponía en práctica una política y organización social revolucionaria, que resultaba atractiva a gran número de intelectuales franceses de izquierda. Antoine partió entusiasmado." (-- Solapa).