La presión de Cassandra es cada vez más insoportable y el peligro que supone, cada vez más real: después de poner en jaque a Wonder Woman, Hermes y Orión con su juego de amenazas, se dirige a por el Primogénito, que está siendo torturado por Apolo mientras cuenta los segundos para su violenta liberación. Con Orión retornado a Nueva Génesis, Wonder Woman ha perdido un importante aliado a las puertas de un enfrentamiento en el que necesitará no uno, sino un ejército de ellos. Mientras, Zola se encuentra con Dioniso, dios de las bacanales.