¿Los pasajes de nuestra historia personal son como representaciones teatrales? ¿Lo son también las escenas de nuestra vida en sociedad? Estas parecen ser algunas de las preguntas que atraviesan esta novela, en la que, usando la técnica de las cajas chinas y las historias paralelas, se imbrica el mundo del colegio secundario, sus alumnos y profesores, sus verdades y leyendas, con el contexto de violencia política y social que se vivió en el Perú en las últimas décadas del siglo pasado, contexto cuyas secuelas aún padecemos y nos hemos asumido con claridad. Este planteamiento, que ya de por sí es interesante, resulta enriquecido por la forma en que es presentado: los capítulos se convierten en actos teatrales, cuyo desarrollo y desenlace son revisitados y evaluados por Héctor, personaje central de esta historia que un día es sacudido por una noticia con la que se topa en la televisión. Con El teatro de las máscaras, Rafael de las Casas no solo nos entrega una primera novela lograda, sino que confirma la solidez de su talento y el gran alcance de su propuesta narrativa.
