Presente continuo de machihembrar, de Odi Gonzales, ha dejado atrás el tono cisneriano y el humor quechua que era visible en Valle Sagrado, optando por una propuesta acorde con el siglo xxi. Los poemas en esta nueva colección son una constelación de versos, de datos, que van destellando en la pantalla. Como ocurre con el flujo de información propio de esta época, los temas disímiles se asocian, se aglomeran, encuentran la multiplicidad de sus significados en sus repentinos estallidos referenciales, en sus desvaríos, en las contradictorias zonas horarias del presente, en su revuelo políglota. Presente continuo de machihembrar es entonces un vehículo con vocación de contemporaneidad que Odi Gonzales usa para navegar en ese destino tan actual que es el del impenitente cosmopolita, del exiliado estacional.
Oswaldo Chanove