Si toda la poesía que se escribe nos remite a un cuerpo, a una ciudad, a un momento, a cierta iluminación, este libro nos conduce a la geografía y la rutina espiritual de Lima, ciudad natal del poeta, y que este ha recorrido hasta en sus insondables bocacalles, plazoletas y esquinas. Por eso, la visión de las cosas del autor figura apareada con la historia de Lima, formando un corpus indisoluble, sensitivo, como protagonista o como vivo telón de fondo de su poesía, con todas sus luces y sus sombras.