Escrito en pleno confinamiento sanitario, este libro explora con rigor documental y con una variada iconografía los ámbitos de la historia, el miedo, la violencia y el humor en épocas de pandemia.
El ensayo despliega su reflexión sobre los imaginarios creados por las epidemias de fiebre amarilla (1868), peste bubónica (1903), gripe «española» (1918-1920) y cólera (1991) en la ciudad de Lima, y da cuenta de procesos sociales, estéticos, ideológicos, y escenarios humanos que establecen correspondencias con la crisis generada por la COVID-19.
Marcel Velázquez Castro se vale de los mecanismos de la interpretación cultural para indagar en el pasado, trazar analogías con el presente e interpelarnos como ciudadanos de un país cuyos espacios de diálogo y libertad se hallan seriamente amenazados por el biopoder.
Hijos de la peste es un ejercicio de autoanálisis que invita a pensarnos críticamente como sociedad en tiempos virulentos: «un esfuerzo de comprensión de los muertos por los vivos, y de los vivos por los muertos».