En Asuntos circunstanciales, el cuerpo femenino se construye palabra por palabra, verso por verso. En el amor juvenil, en la disrupción visceral de la sexualidad, cada poema nos conduce por un sinfín de habitaciones oscuras que resguardan el pudor de los amantes. Cuarenta años después de su primera publicación, este sigue siendo un libro desestabilizador para las estructuras sociales de la Lima más conservadora. (Jorge Zagal Matasoglio)