Cuatro amigos Ariel, Dorian, Rogelio y el narrador de esta
historia descubren que los juegos de naipes son una forma
de mantener intacto el vínculo original, el gestado en los años
escolares. Son también una forma de compartir bocanadas de
humo y confidencias, un sortilegio que hará menos áspero su
desencuentro con la realidad tumultuosa de la Lima que habitan.
Nueve vidas es el nombre del juego de naipes que estos
eternos adolescentes inventan, y es también el título de la novela
que nos entrega Leonardo Aguirre.
Cada capítulo de la novela va eslabonado con un diálogo versificado
que es, nada menos, una larga entrevista que el narrador
concede a un misterioso personaje. Como en una confesión, el
interrogado nos muestra las entrañas del lobo solitario que lo
habita. Es la hora, qué duda cabe, de hacer un ajuste de cuentas
consigo mismo, de enfrentarse al juicio final.